- Muchos se preguntan qué tanto puede hacer el presidente Barack Obama sin el Congreso para cambiar las políticas de inmigración de Estados Unidos. Mucho, de hecho.
Hay algunos límites bajo la ley federal, y cualquier cosa que la Casa Blanca decide hacer en última instancia puede ser impugnada en los tribunales como inconstitucional. Pero destacados expertos legales dicen que la Casa Blanca casi con seguridad podría retrasar indefinidamente los esfuerzos para deportar a millones de inmigrantes que ya están en Estados Unidos sin autorización legal, y que podría darles permisos de trabajo oficiales que les permitan encontrar legalmente empleos, obtener licencias de conducir y pagar impuestos sobre la renta.
Esto es lo que Obama no podría hacer sin la aprobación del Congreso: En general no podría dar a grandes grupos de inmigrantes permiso para quedarse permanentemente en Estados Unidos, y no podría concederles la ciudadanía estadounidense. Y no podría en general hacerlos elegibles para programas de beneficios sociales federales o estatales, tales como pagos de asistencia social.
Dado que el Congreso se negó a aprobar cambios significativos en las leyes de inmigración, la Casa Blanca está dando a entender que Obama sopesa ampliar un programa de suspensión temporal de deportaciones, conocido como Acción Diferida para Llegadas de Infantes, a fin de proteger temporalmente de la deportación a muchos jóvenes inmigrantes que llegaron a Estados Unidos cuando eran niños y permitirles conseguir un permiso de trabajo. Los defensores de la reforma migratoria han estado presionando para incluir a los padres de ciudadanos estadounidenses y los padres de los jóvenes inmigrantes ya protegidos en el marco del programa anterior, que cubre a más de 700.000 inmigrantes hasta el momento.
En total, la ampliación del programa podría afectar hasta a cinco millones de inmigrantes que llegaron sin autorización legal a Estados Unidos.
Los republicanos en el Congreso, entre ellos el presidente de la Cámara de Representantes John Boehner, han dicho que Obama no está haciendo cumplir las leyes de Estados Unidos al ignorar en la práctica la inmigración sin permiso legal.
En un desafío directo a las políticas de Obama, la Cámara de Representantes de mayoría republicana aprobó la noche del viernes una legislación que parecía diseñada para evitar que aquellos que ya han conseguido permisos de trabajo en el marco del programa de suspensión temporal de deportación lo puedan renovar, lo que en última instancia los haría sujetos a deportación. Dado que el Senado es controlado por los demócratas, parece improbable que el proyecto de ley avance.
Entonces, ¿Qué tan poderosamente puede actuar Obama sin la aprobación por el Congreso?
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